lunes, 28 de diciembre de 2015

Canciones traducidas - Atrás da Porta

Atrás da Porta es quizás una de las canciones más bellas que fueron interpretadas por Elis Regina- en la opinión de muchos considerada la mejor cantante brasileña.
El músico Francis Hime en el año de 1972 compuso la melodía y la enseñó a Chico Buarque; al escucharla, Chico se quedó estupefacto por la belleza de su armonía y comenzó a escribir la letra pero, no la terminó.

Otro gran compositor Roberto Menescal tuvo acceso a la melodía y letra y la mostró al pianista César Camargo Mariano y a Elis Regina. Ambos concertaron una grabación y la hicieron en el estudio aún con la letra por terminar. Se cuenta que esta primera grabación fue muy intensa y apasionada ya que Elis puso todo su sentimiento debido quizás a que estaba pasando por  momentos difíciles a causa de la separación de su primer marido, el compositor Ronaldo Bôscoli.

Cuando Chico Buarque escuchó la grabación se emocionó y decidió terminar la letra- “Dei para maldizer o nosso lar, pra sujar teu nome, te humilhar e me vingar a qualquer preço te adorando pelo avesso pra mostrar que ainda sou tua...”. En fin, melodía y letra terminadas, Elis Regina hizo la grabación final y fue un éxito total.

Atrás da Porta narra como ninguna otra canción, de forma tan apasionada, bonita y poética el dolor de la separación.

Ref.
Noites Tropicais



ATRÁS DA PORTA
DETRÁS DE LA PUERTA
Quando olhaste bem nos olhos meus
E o teu olhar era de adeus
Juro que não acreditei
Eu te estranhei
Me debrucei
Sobre teu corpo e duvidei
E me arrastei e te arranhei
E me agarrei nos teus cabelos
No teu peito
Teu pijama
Nos teus pés
Ao pé da cama
Sem carinho, sem coberta
No tapete atrás da porta
Reclamei baixinho
Dei pra maldizer o nosso lar
Pra sujar teu nome
Te humilhar
E me vingar a qualquer preço
Te adorando pelo avesso
Pra mostrar que ainda sou tua
Até provar que ainda sou tua
Cuando miraste fijo en mis ojos
Y tu mirada era de adiós
Juro que no lo creí
Me pillaste por sorpresa
Me incliné
Sobre tu cuerpo y dudé
Y me arrastré y te arañé
Y me agarré a tus cabellos
A tu cuerpo
Tu pijama
A tus pies
Al pie de la cama
Sin cariño, sin abrigo
En la alfombra detrás de la puerta
Me quejé en susurros
Empecé a maldecir nuestro hogar
Para mancillar tu nombre
Humillarte
Y vengarme a cualquier precio
Adorándote a la inversa
Para mostrar que todavía soy tuya
Hasta probar que todavía soy tuya